La salud mental es una de las cosas a las que tenemos que poner mayor atención; es cierto que mantener un cuerpo sano es muy importante, pero a veces nos enfocamos tanto en el exterior, que dejamos de cuidar la verdadera raíz de todo: nuestro interior.

Conforme pasan los años, aumentan las responsabilidades y muchas veces nos rodeamos de un grado de toxicidad que nos impide seguir adelante. Para hacer el camino más liviano debemos trabajar en el equilibrio entre el cuerpo y la mente, de este modo nos convertiremos en un imán de nuevas circunstancias para nuestra vida.

A continuación presento simples acciones con las que podemos trabajar de manera paulatina para poder ir liberándonos de todo aquello que reprime nuestra felicidad…

Sí, agradecer es la base de todo. Aunque la vida sea difícil, es bella. Gracias a ella conocemos los colores, las texturas, los amaneceres, los atardeceres, la comida, los olores; la vida es una aventura fascinante y el hecho de tener la oportunidad de vivirla, es una fortuna que no muchos saben aprovechar.

A veces la gente que nos rodea drena nuestra energía positiva; las personas que son negativas no hacen más que contagiarnos de una energía negativa que nos agota y apaga nuestro brillo.

Los italianos son muy felices, y además de vivir en un país realmente bello, esto se debe a aspectos culturales simples como su estilo de vida. Ellos dedican tiempo a diario para hacer algo que los relaje; si no dejamos que nuestro cuerpo y cerebro respiren del estrés, solo nos estamos limitando a vivir para sobrevivir y no para gozar. «Il dolce far niente», el placer de no hacer nada, y de hacer todo por uno mismo es algo que debes implementar a tu vida.

¿Por qué al aire libre? Porque hay que permitir que el oxígeno llegue a nuestro cerebro y corazón al mismo tiempo que hacemos algo que nos relaja o nos hace felices, esto, entre otras cosas produce endorfinas, la sustancia de la felicidad. Así que conviértete en productor de tu propia endorfina.

Muchas veces estamos tan inmersos en nuestros problemas o en nuestra propia vida que nos olvidamos de la gente que se preocupa por nosotros, y que además nos ha apoyado en circunstancias difíciles. Hay que aprender a mantener buenas relaciones que trasciendan en nuestra vida y nos convierten en mejores seres humanos.

Texto por Arte Jiménez

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