Qué bonito fue extrañarte por 10 minutos.
De esas veces que extrañas en serio, dejando a un lado los enojos, las decepciones y tristezas.
De esas veces que extrañas con mente, corazón y alma.
Qué horrible fue odiarte por 10 minutos.
De esas veces que odias en serio, dejando a un lado los recuerdos, el cariño y anhelo.
De esas veces que odias con mente, corazón y alma.
Qué hermoso fue recordarte por 10 minutos.
De esas veces que recuerdas en serio, dejando a un lado el odio, el cariño y las rarezas.
De esas veces que recuerdas con mente, corazón y alma.
Que necesario fue confundirme por 10 minutos.
De esas veces que te confudes en serio, dejando a un lado los momentos, las ideas y los aciertos.
De esas veces que te confundes con mente, corazón y alma.
Qué perfecto fue amarte todo este tiempo.
Y pensar que lo seguía haciendo, pero a decir verdad, ya no estoy segura de que lo que siento.
Por: M.K.
Fotos: Paweł Brzeziński
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